Zona Satelite!!

UD Las Palmas – Rayo Vallecano (0-1)

Victoria de oro para el Rayo en Gran Canaria. Los de Iñigo Pérez tiraron de oficio, pegada y un chispazo de Isi para llevarse un partido que mete al equipo en zona europea y deja a la UD Las Palmas al borde del KO. La primera parte fue plana, con los madrileños dominando sin filo y los canarios creciendo poco a poco de la mano de Moleiro, el único que pareció rebelarse ante la deriva del equipo. Pero en el 66', la calidad decidió: pase filtrado de Isi, Álvaro la recoge tras un primer intento bloqueado y la clava con la zurda. Golazo, imposible para Horkas. Mientras en Vallecas ya sueñan con volver a Europa, Las Palmas se hunde. Otra derrota, y van... La permanencia empieza a parecer un milagro. 

Valencia – Getafe (3-0)

El Valencia solo necesitó media hora para borrar del mapa a un Getafe que se marchó de Mestalla completamente superado. Fue un vendaval blanquinegro en una primera parte impecable, con un equipo desatado, vertical y lleno de energía, que trituró a los de Bordalás sin piedad. Pepelu, Diego López y Hugo Duro —este último ante su ex equipo— firmaron los goles de una victoria que pone al conjunto che a soñar seriamente con Europa. Corberán ha logrado algo más que una racha positiva: ha creado un equipo reconocible, sólido atrás, con un centro del campo fluido y un ataque punzante. Mosquera y Tárrega volvieron a imponer ley en defensa, y Javi Guerra manejó el partido con una autoridad impropia de su edad. Arriba, Hugo Duro se fabricó dos penaltis, anotó uno, y volvió a dejar claro que está viviendo su mejor momento como profesional. El Getafe, por su parte, encadena cinco derrotas seguidas y dejó una imagen preocupante. Sin orden, sin alma y con errores constantes en defensa, los azulones fueron un juguete en manos de un Valencia que ahora sí, corre desbocado hacia Europa. 

Celta – Sevilla (3-2)

El Sevilla volvió a tropezar, esta vez en Balaídos, y lo hizo de la manera más dolorosa: con uno más durante casi toda la segunda parte y sin saber qué hacer con esa ventaja. El Celta, con coraje y un plan claro, se llevó el partido y se aferra a Europa, mientras los de Caparrós siguen en caída libre y se jugarán la permanencia el martes ante Las Palmas en una final que nadie supo anticipar. Moriba abrió el marcador con una acción de mucha clase tras una genialidad de Aspas. Gudelj empató de penalti y propició la roja a Marcos Alonso, pero ni con esa superioridad numérica supo el Sevilla tomar el control. Mingueza volvió a poner por delante al Celta y Borja Iglesias sentenció en el 90', aprovechando un error grosero de Gudelj. El tanto de Kike Salas en el descuento solo sirvió para maquillar un nuevo desastre. El equipo de Caparrós, lejos de reaccionar, parece aún más perdido. Dos puntos de doce posibles desde su llegada y sensaciones muy preocupantes. Mientras, el Celta, con diez, jugó como un bloque y dejó a su rival sin excusas. 

Girona – Villarreal (0-1)

El Villarreal se llevó los tres puntos de Montilivi gracias a un cabezazo inapelable de Eyong en el minuto 88, cuando todo apuntaba a un empate sin goles. El canterano groguet, recién ingresado al campo, aprovechó un centro medido de Pedraza para rematar con temple y precisión al palo largo y firmar una victoria tan trabajada como merecida. El equipo de Marcelino fue el claro dominador de la primera parte, con más presencia en campo rival y las ocasiones más claras, aunque sin acierto de cara a portería. El Girona, plano y espeso, apenas inquietó a Jörgensen y se aferró al 0-0 como mejor noticia antes del descanso. Tras el paso por vestuarios, los de Salva Fúnez —que asumió el mando por los problemas de salud de Míchel— mostraron una mejor versión, pero siguieron sin encontrar el camino al gol. Y en la recta final, el Villarreal, paciente y constante, encontró el premio. Un golpe duro para el Girona, que pierde fuelle en la lucha por la permanencia. 

Mallorca – Valladolid (2-1)

Partido con ritmo y emoción el vivido en Son Moix entre un Mallorca que fue de menos a más y un Valladolid que empezó como un tiro pero acabó desdibujado. El conjunto de Rubio se adelantó pronto gracias a un contragolpe perfecto: Moro dejó atrás a Valjent con una arrancada potente y sirvió el pase atrás para que Chuki marcara a placer. Los pucelanos incluso pudieron ampliar su ventaja, pero Greif salvó con reflejos una ocasión clarísima. El Mallorca, lejos de venirse abajo, reaccionó bien. Empezó a llegar con peligro por bandas y, tras varios intentos, empató el partido con un centro de Maffeo que encontró a Mascarell solo en el segundo palo. El mediocentro, con calma, fusiló a Ferreira. Y nada más arrancar la segunda mitad, los bermellones dieron el golpe definitivo: pase filtrado para Asano, que con mucha inteligencia encontró a Darder en la frontal. El ex del Espanyol la paró y la colocó con clase donde no llegaba el portero del Valladolid. El 2-1 fue suficiente para que el Mallorca se llevase tres puntos muy trabajados. 

Atlético de Madrid – Real Sociedad (4-0)

El Atlético de Madrid pasó por encima de la Real Sociedad con una contundencia incontestable. El gran protagonista de la noche fue Alexander Sorloth, autor de los cuatro goles del conjunto rojiblanco, tres de ellos en apenas cuatro minutos que dejaron el encuentro visto para sentencia antes del primer cuarto de hora. El delantero noruego, que llegó a LaLiga precisamente de la mano del club donostiarra, firmó una de las actuaciones más demoledoras del curso en el Metropolitano. La Real empezó el partido con mal pie tras la baja de última hora de Aguerd, y la improvisación en defensa se convirtió en un lastre desde el primer minuto. El Atlético lo detectó rápido y fue directo al cuello. En el minuto 6, Sorloth abría el marcador. Tres minutos después, ampliaba la ventaja. Y en el 10, aprovechando un error defensivo, sellaba el hat-trick más rápido de la historia del campeonato. El conjunto de Simeone, sin urgencias clasificatorias, mostró una versión ambiciosa y arrolladora, con una presión muy alta y una eficacia ofensiva total. El cuarto tanto llegó antes de la media hora, con una nueva aparición del noruego para cerrar su póker tras un centro de Javi Galán. A partir de ahí, el Atlético levantó el pie y la Real trató de minimizar daños. Imanol introdujo cambios tras el descanso para evitar una goleada mayor, pero el daño ya estaba hecho. Sorloth, ovacionado por el Metropolitano en el minuto 73 al ser sustituido, se marchó como héroe de una noche que deja a la Real tocada en sus aspiraciones europeas. El Atlético, en cambio, firmó una victoria de prestigio, una de esas que refuerzan el ánimo y dejan una imagen poderosa. Y lo hizo con un protagonista claro que, por una vez, no se llama Griezmann. 

Leganés – Espanyol (3-2)

Duro golpe para el Espanyol en Butarque. El equipo de Manolo González cayó con claridad (3-1) ante un Leganés que se jugaba la vida y lo demostró desde el primer minuto. Los pepineros salieron a por todas, y con fútbol, intensidad y mucha más fe, se llevaron un triunfo que les permite seguir soñando con la salvación. Para los pericos, en cambio, fue una de esas tardes para olvidar, en las que todo sale torcido y el rival te pasa por encima. Los goles de Raba y Diamande —el mejor de la primera parte, y con diferencia— premiaron el buen inicio del equipo de Borja Jiménez, que fue superior en todo: en las llegadas, en la presión, y sobre todo, en las ganas. El Espanyol tuvo su oportunidad para adelantarse en un cabezazo de Edu Expósito, pero se quedó ahí. Tras el descanso, Manolo intentó mover piezas. Quitó a Král y Calero, y metió a Tejero y Veliz. Pero el cambio de dibujo no tuvo el efecto buscado. El equipo seguía atascado y, para colmo, llegó el susto: Joan García se jugó la roja en una salida muy arriesgada. Por suerte, todo quedó en un susto... aunque minutos después llegaría otro golpe, más doloroso: gol en propia de Kumbulla y 3-0. El Espanyol reaccionaba al final: el primero para los nuestros lo anotaba Cabrera de cabeza, en un rechace de otro cabeceo de Cheddira a la cruceta en el 79, y en la última jugada del encuentro Pere Milla hacía el 3-2. Todoo demasiado tarde. La derrota deja al Espanyol con la permanencia aún en el aire y la sensación de haber desperdiciado una oportunidad de oro para sellarla con tiempo. Toca levantarse rápido, porque el jueves llega el derbi. Y ahí no valen excusas. 

Barça – Real Madrid (4-3)

El Clásico tuvo dos caras: el Real Madrid comenzó mandando con un 0-2 que parecía encarrilar el partido, pero se desmoronó por completo ante un conjunto azulgrana que reaccionó con autoridad. El equipo de Flick, intenso y dominador, le dio la vuelta con un 4-2 incontestable antes de acabar la primera mitad que evidenció todas las carencias defensivas del equipo madridista. Tras el buen inicio, los de Ancelotti desaparecieron del partido. Perdieron el control, la presión y la solidez. El Barça, por contra, olió sangre, aceleró y convirtió la grada en una fiesta hasta que Mbappé logró un 4-3 que silenció a un Montjuïc que prácticamente acabó pidiendo el final. Al final, con este triunfo y pese al sufrimiento final, el Barça se acerca al título mientras el Madrid se queda con la sensación de haber dejado escapar mucho más que tres puntos.