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El Real Madrid goleó al conjunto austriaco (0-4) para regresar a la capital con los deberes hechos antes de su debut en Liga el próximo 19 de agosto. 

El Real Madrid cumplió en Austria. Los de Xabi Alonso se llevaron un abultado triunfo de Innsbruck al golear al WSG Tirol (0-4), en un estreno de Mbappé con el '10' por todo lo alto y en el que la mejor noticia fue la implicación defensiva de los de arriba.
Se plantó en su campo el Tirol para recibir a un Real Madrid con ganas de demostrar, tras la discreta temporada pasada y el batacazo del Mundial de Clubes con la goleada del PSG. Ordenado, con las líneas bien juntas, esperaron los austriacos a los blancos, a los que les costó solo 10 minutos de partido romper la barrera.
Avisó, primero, Mbappé, con un disparo palo largo tras un saque de esquina. Le siguió Arda Güler, el timón de este Madrid y más inspirado que nunca para mover el juego, con un balón al larguero que fue solo el inicio de su exhibición. Pero no fue otro que Éder Militao, que ya estrenó su cuenta goleadora este curso con un golazo al Leganés en un partido de entrenamiento, el que abrió la lata.

El central brasileño, en el área para rematar un saque de esquina en el que intentó salir al contragolpe el Tirol, puso en la red un remate de cabeza bombeado tras un centro medido de Brahim, que le ganó la partida en el once titular a un Rodrygo envuelto en un sinfín de rumores de adiós al conjunto blanco. No había terminado de celebrar el equipo merengue cuando llegó el segundo: Mbappé, con ganas de estrenar su '10', hizo un desmarque perfecto en el área para recibir un balón entre línea de Güler y hacer el segundo tanto de la tarde con un remate a la media vuelta.
Siguió dominando el Real Madrid, con cada vez más peligro gracias a la implicación de sus estrellas en defensa, con presiones altísimas cerca del área rival que hacían temblar la portería austriaca. Pero no consiguió volver a mover al marcador y se fue al descanso conformándose con dos de ventaja. Ese resultado le duró solo 15 minutos al volver de vestuarios, con los mismos once que había arrancado el partido.
Fue de nuevo Mbappé. Otro gran movimiento de 'killer' de área del francés le dejó solo ante el portero, al que regateó sin complicaciones para completar su doblete a placer. Pero no estaba satisfecho el galo, que pudo irse de Austria con su primer hat-trick de la temporada en el bolsillo si no hubiese sido por las estiradas del guardameta rival.

No volvió a marcar Kylian, pero sí tuvo tiempo de asistir: en otro balón que recibió en el área, entretuvo a la defensa con un sinfín de bicicletas a la espera de la llegada de Rodrygo, que definió con un remate sencillo al segundo palo. Sonrió el Real Madrid, pero no el brasileño, que disputó solo nueve minutos.
Solo una ocasión clara tuvo el Tirol de hacer el gol del honor, ya cuando Xabi Alonso había cambiado casi al completo su once, pero Anselm la desperdició: al austriaco, que había recibido solo entre los centrales, se le hizo de noche al pisar área y Lunin, sin abandonar el área pequeña, atrapó la pelota con facilidad.
Test superado, con nota, para el Real Madrid, especialmente por la actitud de unos jugadores convencidos de la idea del técnico tolosarra, que ya cuenta los días para debutar en Liga: el próximo martes 19 de agosto, ante Osasuna en el Bernabéu.