Zona Satelite!!

El conjunto colchonero no tuvo opciones en un desastroso partido perdido por 4-0 

El Atlético de Madrid arrancó este domingo su andadura en el Mundial de Clubes de la peor manera posible, con la derrota ante un poderosísimo PSG que dio pocas opciones a los de Simeone. Los dos goles de la primera mitad fueron un losa para los rojiblancos, que pese a todo lucharon para revertir el marcador en la segunda mitad, eso sí, sin éxito. Dos partidos les restan ante los Seattle Sounders y Botafogo para alcanzar las eliminatorias.
Intenso y enchufado arrancó un Atlético esforzado en la presión en campo rival, empuje que apenas duró cinco minutos antes de que el equipo francés empezara a desplegar su fútbol directo y a encadenar llegadas de peligro.

Encontró cierta comodidad sin balón, eso sí, pero la posesión dio confianza a los franceses y, con ella, llegó el primer tanto al cuarto de hora. Una buena combinación en la frontal dejó a Fabián en posición de francotirador. Su golpeo duro y raso besó el fondo de la red sin opción posible para Oblak en la estirada.

El gol dio todavía más alas a los de Luis Enrique, capaces de desplegar puro fútbol de control y asfixiar a los rojiblancos, incapaces de avanzar en los pocos minutos que disponían de la posesión. Las llegadas del PSG dejaron de ser tan clarividentes, parecía que esperaban el pitido mientras mareaban al Atlético, pero fue entonces cuando, en dos jugadas, cayó el segundo.
La primera fue un ataque rojiblanco que Griezmann resolvió con un disparo demasiado centrado. La segunda fue la contra del PSG que aprovechó Vitinha para internarse entre un pasillo de jugadores y remachar el gol ante Oblak que dio fin al primer acto.
No fue plácido el partido para el Atlético en la reanudación. Koke, recién incorporado, vio una rápida amarilla y Oblak tuvo que sacar una gran mano para evitar de milagro el tercer gol del PSG en un gran disparo de Vitinha.

Para más inri, el equipo de Simeone, algo mejor con el paso de los minutos, encontraría el gol gracias a la alta presión y a una transición ofensiva zanjada con un gran disparo de Julián Álvarez. La desgracia, la anulación del tanto, tras la revisión del VAR, por una falta de Koke en el robo.
Simeone buscó una reacción, que no llegaría, a base de cambios. El paso de los minutos todavía invitaba a ser optimista con el nivel mostrado, pero un susto en un mal saque con la mano de Oblak terminaría con Lenglet expulsado por protestar. No era el día, estaba claro, y más aún cuando, a falta de diez minutos para el final, Sorloth perdonó un remate a puerta vacía tras un pase de la muerte perfecto.

Simeone se llevaba las manos a la cabeza, pues tras revertir la terrible dinámica de la primera parte, todavía tendría que ver dos goles más. El tercero tras un desastre defensivo de los suyos que puso en bandeja el tercer gol de Mayulu; el cuarto fue de penalti, por mano de Le Normand, anotado por Lee.
Duro y doloroso estreno mundialista para los rojiblancos, que confían en cumplir ante el Seattle Sounders y el Botafogo para superar la fase de grupos del Mundial.